Las nuevas tecnologías son la forma más eficaz y rápida de mejorar estos indicadores y empezar a crecer al ritmo de las exigencias del mercado.
En el siglo XXI los viejos programas ofimáticos o de contabilidad ya no son la mejor opción. Existen ahora las aplicaciones tipo ERP, concretamente el ERP industrial con funcionalidades específicas para este sector, que nos permiten acometer todos los procesos de una empresa y organización.
El ERP industrial, la clave para mejorar la productividad y competitividad
En el sector industrial, y en general en cualquier empresa, en el pasado cada departamento usaba software diferentes para procesar la información, sin apenas interacción entre esos programas. Sin embargo, a día de hoy y mediante el uso de un software industrial tipo ERP, cada departamento de la empresa tiene acceso a información centralizada y en tiempo real, lo que facilita a los responsables la coordinación de los equipos y la búsqueda de información.
Del mismo modo, las aplicaciones industriales contribuyen así a construir un método de trabajo sistemático y bien organizado. De esta forma, se reducen los tiempos destinados a tareas del día a día, se reducen o eliminan los trabajos duplicados y se cometen menos errores en la gestión y manejo de datos, gracias a la integración de la información y la automatización en los diferentes procesos de negocio.
En definitiva, un software industrial nos permite mejorar, de manera notable la productividad de la compañía.
Con un software ERP industrial, cada departamento tiene acceso a información centralizada y en tiempo real, lo que facilita a los responsables la coordinación de los equipos y la búsqueda de información.
Soluciones de gestión ERP industrial
Pero en un sector tan variado como la industria, no vale cualquier tipo de programa ERP. El sector industrial tiene sus propias características. A la hora de elegir un programa de gestión, es preciso decantarse por uno que conozca sus problemas concretos. Un software ERP industrial debe ser capaz de llevar a cabo una buena planificación de la producción, un buen control de pedidos, el mantenimiento de mercancías de seguridad, la gestión de las órdenes de compra, la previsión de suministros, el aprovisionamiento bajo demanda y las órdenes de fabricación.
Necesitamos por tanto un software de gestión de mantenimiento industrial que nos permita controlar la producción, gestionar los tiempos de la maquinaria y la mano de obra, controlar las paradas en la cadena de suministros, el registro y la clasificación de incidencias, los problemas de control de calidad, la tesorería, la contabilidad, el almacén, la logística y, en definitiva, todas las funcionalidades básicas que incluiría un software ERP industrial.
